Back to blog

Pequeños rituales que nos sostienen en medio del caos

By Oriana Leones
clock icon 4 min read 17 Sep 2025

En la vida hay etapas en las que todo parece ocurrir al mismo tiempo: responsabilidades que se multiplican, proyectos que exigen más de lo esperado, situaciones personales que demandan atención inmediata, emociones que se entrelazan y terminan por desbordarnos.

A medida que avanzamos en nuestro camino, la intensidad del día a día aumenta, y con ella, la sensación de estar en medio de una tormenta que no siempre sabemos cómo manejar.

El caos no es necesariamente algo negativo. 

Muchas veces el caos es el reflejo de que estamos en movimiento, de que nos atrevimos a salir de la zona de confort, a aceptar nuevos retos, a crecer en distintos aspectos de la vida. Pero eso no lo hace más sencillo. Hay momentos en los que el cansancio pesa, en los que la incertidumbre paraliza y en los que lo más tentador es querer pausar el mundo por un instante o incluso querer renunciar.

Y es ahí donde entran en juego los pequeños rituales. Esas costumbres que pueden parecer insignificantes desde afuera, pero que, para quien las practica, se convierten en refugios de calma: Tomarse cinco minutos para preparar un café, dar un paseo breve antes de empezar el día o simplemente respirar hondo antes de una reunión difícil.

Son detalles sencillos, pero sostienen más de lo que creemos. 

Lo interesante es que esos rituales no solo sirven para resistir el presente, también nos preparan para el futuro. Cada pausa consciente nos entrena para atravesar las próximas tormentas con mayor seguridad. 

Con el tiempo, al mirar atrás, nos damos cuenta de que gracias a esos momentos de calma fuimos capaces de resistir, de aprender de los errores, de encontrar orgullo en lo logrado y, sobre todo, de sentirnos un poco más firmes frente a lo que viene.

Salir de la zona de confort 

Asumir nuevos retos siempre traerá consigo incertidumbre, pero no tendría sentido vivir sin esos desafíos. Lo importante es reconocer que no podemos controlar todo lo que ocurre afuera: los cambios, las demandas, las pérdidas, los retos inesperados. Lo que sí podemos decidir es cómo enfrentarlos. Y es ahí cuando los rituales cumplen una misión poderosa: nos recuerdan que, aunque no podamos detener la tormenta, sí podemos elegir cómo atravesarla.

El futuro siempre será incierto

Siempre habrá nuevos retos que nos pondrán a prueba y que, posiblemente, nos harán dudar de nuestras capacidades. Pero cuando tenemos pequeñas prácticas que nos sostienen, podemos confiar en que habrá un espacio propio al cual volver, una brújula silenciosa que nos ayude a reencontrar claridad, equilibrio y serenidad.

Con el tiempo, comprendemos que no se trata de esperar a que el caos desaparezca, sino de aprender a encontrar calma en medio de él. Y que esos gestos sencillos: cada costumbre, cada pausa, cada respiro consciente; es un recordatorio de que el crecimiento no es un destino al que llegamos, sino un viaje que aprendemos a recorrer con mayor sabiduría.

Empower your growth with a partner who understands your vision. From top-tier talent to cutting-edge solutions, we're here to help you achieve more— faster, smarter, and seamlessly.